Vinylclick
La higiene siempre ha sido uno de los puntos más importantes tanto en hogares como en establecimientos públicos. No obstante, y teniendo en cuenta los tiempos que corren y la situación en la que nos encontramos, ahora aún ha adquirido una mayor importancia.
Dentro de los elementos que conforman el interior de una casa, un comercio o un restaurante, el suelo es quizá el lugar más crítico cuando hablamos de higiene, y mantenerlo limpio es crucial para mantener limpio dicho entorno.
Es importante incidir en que la limpieza e higiene de un suelo viene marcada ya de entrada por el material que hayamos elegido. Así pues, existen materiales más propicios a albergar gérmenes que otros, materiales más delicados y difíciles de limpiar, o materiales que simplemente requieren de unos cuidados que son casi imposibles de llevar a cabo con el ajetreo de nuestra vida diaria. En este sentido, ahora más que nunca, debemos tener muy en cuenta estos factores a la hora de elegir el suelo ya sea para nuestra casa como para nuestro negocio.
¿Y cuáles son los suelos más higiénicos que podemos encontrar en el mercado?
Dejando atrás suelos como la moqueta o algunos tipos de madera, en primera instancia puede resultar difícil distinguir cuáles son los suelos más higiénicos del mercado. Sin embargo, el panorama se despeja claramente cuando observamos cuáles son los suelos preferidos por los laboratorios en los últimos años. Hay que tener en cuenta la rigurosa normativa existente en cuanto a higiene y seguridad que deben seguir los laboratorios alimenticios, químicos o farmacéuticos, que les obliga a instalar en sus centros suelos con unas características específicas muy concretas. Pues bien, de todos los suelos existentes en la actualidad en el mercado, solo existe un tipo de suelo que cumple con todos requisitos exigidos por la Normativa Sobre Suelos Para Laboratorios: los suelos de vinilo.
Resistencia a las manchas, las rozaduras, los líquidos, la no acumulación de bacterias y hongos, resistencia anticorrosiva, alta durabilidad, facilidad de limpieza y mantenimiento… son solo algunas de las exigencias que los laboratorios deben cumplir con sus suelos, y que los suelos de vinilo cumplen sobradamente. Por esa razón, los suelos vinílicos se han convertido en los últimos años en la primera opción para todo tipo de laboratorios. Y estos son los principales motivos:
- Los suelos vinílicos, debido a su composición, impiden el crecimiento y acumulación de hongos y bacterias.
- Son 100% hidrófugos, es decir, resistentes al agua y a los líquidos, no sufriendo daños por derrames de productos químicos.
- De igual forma son altamente resistentes al desgaste, las rozaduras y a los impactos y caídas de objetos.
- Están diseñados para amortiguar golpes y absorber el sonido y son ergonómicos, transmitiendo calidez y confort al caminar sobre ellos, lo que los convierte en suelos ideales para todo tipo de centros de trabajo.
- Su perfecta y sencilla instalación (en click en el caso de los suelos Vinylclick) consigue una fijación perfecta e integral del suelo a paredes y elementos fijos sin juntas o solapes.
- Su mantenimiento y limpieza es muy sencillo, ya que no retienen suciedad en la superficie. Por lo tanto no requieren cuidados especiales ni labores de limpieza intensivas.
Como veis, cuando se trata de higiene y seguridad, los suelos de vinilo están muy por encima del resto., siendo con diferencia los suelos más higiénicos del mercado. Esto todavía se acentúa más si hablamos de nuestros suelos Vinylclick, uno de los mejores suelos vinílicos que existen en la actualidad.
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